PACÍFICA-MENTE Celebración 26 04 21

 

CELEBRACIÓN                                                              26 de abril de 2021

    Este mes de abril finalizamos una serie de encuentros que desde el día 18 de enero, han sido inspirados por una antigua plegaria hebrea que compartí con vosotros unos días antes.

    En el anterior encuentro hablamos del valor y es que tal y como decía dicha plegaria: “si fuéramos realmente valientes, bailaríamos y cantaríamos de alegría al tomar conciencia de que cada segundo de la vida es un obsequio”.

    Esta afirmación incluye varios aspectos que no debemos dejar pasar desapercibidos. El primero sería la toma de conciencia, ese “darnos cuenta” de que esta vida anónima y ordinaria, a veces frustrante incluso aburrida, está compuesta de pequeños instantes, momentos o segundos que en realidad, son sagrados y que por tanto, merecen nuestro entusiasmo.

    Apreciar la oportunidad que cada uno de ellos nos ofrece y vivir siendo conscientes de su importancia, nos traslada a una dimensión de vida donde todo es digno de alabanza y agradecimiento, hasta el episodio que más rechazo nos provoque.

    Saber que estamos aquí para crecer, aprender y madurar, para experimentar todo aquello que nuestro espíritu precisa con el fin de trascender nuestra limitada percepción. Una percepción que en definitiva, fue la responsable de nuestra llegada a un mundo dual y de conflicto que en realidad, es la consecuencia de la proyección de nuestra mente separada.

    Otro aspecto a considerar es la idea de “obsequio” como “presente”, el Presente como único tiempo real que cuando es considerado en el día a día, se convierte en la puerta de acceso a la eternidad. Liberarse de la concepción lineal del tiempo, del regreso al pasado y de la anticipación por el futuro, es alcanzar una plenitud que sólo en el “ahora” se despliega sin ningún tipo de traba. Ahora es lo único que hay y honrar el presente bendice y apacigua nuestra mente y nuestro corazón.

    Por último, considerar cómo valentía el bailar y cantar de alegría ante el misterio diario. La “Celebración” que merece saber que el día a día es un misterio que se nos presenta como una invitación para mejorar el mundo desde nuestra mejora interior.

    Celebrar es de valientes porque hay que mostrar mucho coraje para estar por encima de los conflictos y del miedo, sabiendo que somos amados y que hemos venido a expresar ese Amor que llevamos dentro, pero sobre todo, para confiar en que ese Amor nos ampara y nos protege por y para siempre.

Plegaria hebrea del Rosh Hashana, comienzo del año nuevo judío.

“Que tus despertares te despierten. Y que al despertarte, el día que comienza te entusiasme (Entusiasmo). Y que jamás se transformen en rutinarios los rayos del sol que se filtran por tu ventana en cada nuevo amanecer. Y que tengas la lucidez (Discernimiento) de concentrarte y de rescatar lo más positivo de cada persona que se cruza en tu camino. Y que no te olvides de saborear la comida, detenidamente, aunque solo sea pan y agua. (Vivir en la gracia) Y de encontrar algún momento en el día, aunque sea corto y breve, para elevar (Elevación) tu mirada hacia lo alto y agradecer por el milagro de la salud, ese misterio y fantástico equilibrio interno (Armonía). Y que logres expresar el amor que sientes por tus seres queridos (Extensión). Y que tus abrazos, abracen. Y que tus besos, besen. Y que los atardeceres no dejen de sorprenderte y que nunca dejes de maravillarte. Y que llegues cansado y satisfecho (Satisfacción) al anochecer por la tarea realizada durante el día (Servicio). Y que tu sueño sea calmo, reparador y sin sobresaltos porque no cometiste ninguna deslealtad (Lealtad). Y que no confundas tu trabajo con la vida, ni tampoco el valor (Valor) de las cosas con su precio. Y que no te creas más que nadie porque sólo los ignorantes desconocen que no somos más que polvo y ceniza. Y que no te olvides, ni por instante que cada segundo de la vida es un regalo, un obsequio y que si fuéramos realmente valientes, bailaríamos y cantaríamos de alegría al tomar conciencia de ello. (Celebración)

Como un pequeñísimo homenaje al misterio de la vida que nos abraza y nos bendice. Feliz Vida…..”