PACÍFICA-MENTE Desintoxicación 080424

 

DESINTOXICACIÓN                                                     8 de abril de 2024

    Todo entrenamiento está focalizado en procurar una mejora del bienestar del “atleta” en cuestión, término que procede del griego “athletes” que a su vez procede de “aethos” que significa esfuerzo, esta etimología nos recuerda que el que entrena, el que aspira a mejorar en este caso particular, su espíritu, debe imprimir a su deseo, un esfuerzo real, un empeño que pasa tanto por hacer como por dejar de hacer. “Abandona el alimento tóxico” es otro aforismo que aplica Atysha en su ascensión a la cima espiritual.

    En otras ocasiones hemos hablado de cómo alimentar nuestra alma, (respira Amor, siente Felicidad, sonríe Paz) porque todo aquello que fomentamos, aquello a lo que prestamos atención y de ese modo, concedemos nuestra energía, es lo que al final vamos a manifestar en nuestra vida. Identificar esos “venenos” que ensucian nuestra alma, que nos alejan de la paz y el Amor que somos, puede parecer fácil a primera vista, pero la cosa se complica si nuestra mente está confundida y abarrotada por pensamientos de todo tipo.

    El contenido mental puede ser saneado si así lo decides y la simplicidad es una gran aliada para que lo hagamos con éxito. Hay pensamientos benéficos que nos hacen crecer, pero hay otros que nos debilitan y disminuyen, hay actividades, lugares o incluso, personas que nos llevan hacia unos o hacia otros y es nuestro deber identificar qué nos lleva a la negatividad, la tristeza y la apatía para “abandonar” esa costumbre, rutina o hábito que lejos de elevarnos, nos hunde en la miseria.

    Observa qué información consumes: qué lees, qué ves, a qué lugares vas, con quién te relacionas, con qué te identificas, si albergas prejuicios raciales, sexistas, políticos.., si guardas rencores, si hablas más de la cuenta, si tu mente está tan llena que no queda espacio para la reflexión y el silencio. Observa en qué inviertes tu tiempo, si sólo buscas entretenimiento o si además buscas ampliar y mejorar tu existencia, si estás condicionado por tu sociedad, tu familia, tu entorno, tu ideología, si te debes a esa etiqueta (hindú, cristiano, comunista...), a expectativas ajenas...…

    Abandonar la toxicidad pasa por liberarse de todo aquello con lo que te identificaste: tu patria, tu religión, tu trabajo…, pero la desintoxicación es también renunciar a la atención de los demás, a darse importancia y pretender suscitar la admiración ajena…, al pastel de la vanidad que es el alimento tóxico más sutil porque alimenta el ego. Decide soltar todo aquello que está prefabricado, que no es esencial, y comienzas a ser más simple y natural más espontáneo, más auténtico.

    Descubres una forma de inteligencia que vive en el presente, que sabe que la vida es hoy, renovada, fresca, creativa y despierta, ya no puedes dormirte, ni aferrarte a lo pasado y lo conocido. Una inteligencia que en un mundo de sonámbulos resulta ofensiva y cae mal porque el cambio de paradigma que estás mostrando, se vive como amenaza.

    La idea del yo “personaje” va cayendo y dejando paso a un nuevo estado interno liberado que por fin puede “descansar en paz” y disfrutar de la inocencia y la pureza de quién “pobre de espíritu” se desposee de sí mismo y se entrega a la inmensidad del Amor, a esa vacuidad plena que fortalece y da sentido a su experiencia humana.

    Y es ahora que Atysha nos conduce a través de un nuevo aforismo “No seas coherente” que nos invita a dejar el pasado y su lógica a un lado para no actuar conforme se espera, de forma repetitiva y previsible, sino de forma libre y creativa, con la más absoluta espontaneidad. No hay respuestas fijas, ni referencias estables, porque todo es nuevo y tú no eres el mismo de antes, por tanto no puedes aplicar las mismas fórmulas y soluciones que hace años pudieron servir, pero que ya no funcionan aquí y ahora.

    Para entender mejor este consejo podemos cambiarlo por “Sé espontáneo, natural e inocente”, porque la vida es mucho más valiosa que la lógica, la vida es fluctuación, es cambio y no puedes aferrarte a una sonrisa cuando tu corazón está llorando…., has de sentirlo todo en profundidad y sólo así podrás hallar tu autenticidad.

    Ser quién eres según Osho, es renunciar a tu carácter, a tu respetabilidad, a tu previsibilidad. El sabio, el feliz, siempre sorprende y nunca hace concesiones, no tiene nada que demostrar porque es libre.