PACÍFICA-MENTE Humildad y Cortesía 07 06 21

 HUMILDAD Y CORTESÍA                                          7 de junio de 2021

    En el análisis de los 9 atributos del Amor que Drummond extrae de la Carta de San Pablo a los Corintios, los puestos 4 y 5 son para la Humildad y la Cortesía.

    Somos pacientes, desoímos la voz del ego y nos desprendemos de la necesidad de sufrir. Somos amables y por tanto, lejos de ser hostiles, lo que emitimos es una benignidad genuina y espontánea. Somos generosos y entendemos que la envidia no tiene ninguna razón de ser. El siguiente paso lógico es aprender a ser humildes abandonando la tentación de la vanidad.

HUMILDAD “El amor no se envanece, no es jactancioso” y así lo expresaba Cristo: “No dejes que tu mano izquierda sepa lo que hace la derecha”. Esta frase no es una invitación a la intriga, como algunos piensan, sino que referida a las buenas obras, nos invita a omitir nuestra autoría con el fin de no ocasionar “deudas” o “sometimiento” al beneficiado de nuestra acción.

    Se trata de “renunciar” a los deseos del ego, a la necesidad de alardes, premios o reconocimientos. Es entender que no somos especiales, sino que somos lo mismo que aquel que recibe nuestra intervención. Lo que hacemos con Amor, lo hacemos en nombre del Amor y éste no tiene nombre y apellidos, sólo actúa por la satisfacción interna de saber que hace lo que siente correcto.

    

    Dar y Recibir son lo mismo: lo que doy, me lo doy por tanto, no preciso más gratitud que la que siento por tener la oportunidad de expresarme como lo que en realidad Soy.

    Pero hay otro matiz en la humildad que Drummond no contempla. “Sólo se que no se nada”, afirmó Sócrates y UCDM dice: “La humildad trae paz porque no exige que tú debas regir el universo, ni juzgar las cosas como quisieras que fueren”

    El ego cree que todo lo sabe, percibe los problemas desde sus percepción limitada, por tanto su solución también es limitada. Sin embargo, tu verdadero Ser reconoce que no sabe lo que más le conviene en cada situación. Esta humildad nos permite abrirnos a recibir y aceptar lo que en realidad nos corresponde, sin interferencias basadas en el juicio, el miedo o el conflicto.

“La humildad nos coloca en la disposición de reconocer que si en mi vida, el bienestar y la felicidad no son constantes, es que algo estoy haciendo mal, es que no sé dónde está el error, es que tal vez, debo empezar a mirar hacia adentro y dejar de “echar balones fuera”, cesar de culpar a otros de ser responsables de mis desgracias, de mis emociones, de mi sufrimiento, y como no, dejar de culpabilizarme por los sentimientos o las ideas de los demás.”

Vemos que la idea de humildad está muy conectada con la idea del no juicio. No soy quién para juzgar a nada ni a nadie, no porque yo no sea importante, lo somos todos, sino porque desde mi perspectiva limitada, no alcanzo a “ver” todo el conjunto de factores que han influido en una situación determinada.

CORTESÍA “El amor no hace nada indebido” Drummond nos habla de cortesía refiriéndose al ámbito social. Como una cuestión de etiqueta y saber estar frente al mundo, que si se desarrolla desde el amor, no puede fallar. Según él, el amor es como un pasaporte que nos garantiza el éxito en cualquier escenario posible.

    Desde esta perspectiva, nos invita a no temer la rigidez de protocolos o normativas, sabiendo que el Amor es capaz de salvar las barreras más altas, sea cual sea la forma que éstas adopten. Cuando emitimos amor, éste se percibe y de alguna manera, el otro recibe una información que derriba sus defensas y reticencias.

    Por otro lado, otra forma de ver esta afirmación de que el Amor no puede hacer nada indebido, es entender que cuando portamos una intención amorosa y la depositamos en nuestras acciones, independientemente del resultado que suceda, sabremos desde la humildad, que todo está bien.

“Esta simple cortesía es todo lo que el Espíritu Santo te pide: que dejes que la verdad sea lo que es.” UCDM